Demasiadas zorras…

Espero de corazón que ninguna se tope a alguna como la fulana de la que voy a hablar hoy. De ahora en adelante la denominaré Buñuelita, no es porque se dedique a comer o preparar buñuelos… es un directazo sólo para la fulana. Ella es una chica a simple vista común y corriente. Pero Buñuelita trae consigo un pasado, presente y muy seguramente futuro siniestro… Es una ZORRA quita marido.

Este personaje es una de esas que sufre de complejo de villana de telenovela mexicana. De esas chicas que se enamoran del marido de la buena y hacen todo tipo de planes maquiavélicos y tenebrosos para separar la pareja. Bueno Buñuelita es de ese tipo de mujer.

Cuando un tipo se le fija en la mira a Buñuelita, ella hace toda una investigación de la pareja, quienes son sus amigos, sus puntos débiles, los momentos de soledad del chico, los lugares que visita… mientras reúne ese tipo de información, va haciendo su proceso de planificación cuya meta final es, por supuesto, separar la pareja y quedarse ella con el marido. Yo he llegado a pensar que este tipo de mujeres disfrutan al máximo esto, la intriga, el conflicto… todo esto les genera una adrenalina de la que parecen adictas.

Este tipo de féminas utilizan las redes sociales para realizar la respectiva investigación, como fuente de información y hasta para tener visualizado el macho con el que se va a meter próximamente… De paso tratar de entablar amistad con el caballero por redes para empezar el proceso de coqueteo.

Pero cuando las cosas no le salen bien y de alguna manera es expuesta en redes sociales, como la vagabunda quita marido que es, las cosas se le ponen color de hormiga y ya tienen de enemigo a medio mundo, hace el drama de:

“Me voy de Facebook, este mundo cruel en el que me han hecho tanto daño, ya no quiero que me hieran más, que me calumnien, han arruinado mi vida… adiós” y ocultan la información de la cuenta, algunas quitan hasta la foto y dejan el perfil blanco, sin nada y no se vuelven a conectar sino después de un tiempo.

Pero las muy zorras andan por ahí con otro, jodiéndole la vida a las parejas que encuentra por ahí.

¿Cuántos matrimonios lleva Buñuelita? Dos ¿Cuántos concubinatos? Dos ¿Cuántos noviazgos? Le he contado 23 ¿Cuántos vacilones? Ni idea, pero por el prontuario todos nos podemos hacer una idea que ese número es como mínimo de dos dígitos… y tiene 37 años.

Sé por fuente segura que ha estado en sus dos matrimonios, que el juramento y las palabras donde le declara amor eterno a su nueva media naranja fueron las mismas en ambos casamientos. Siempre usa los mismos votos de amor en todas sus bodas.

Ósea, todos han sido el amor de su vida, su media naranja, su milagro de amor…

Y eso es una constante de este tipo de mujerzuelas, así como en el matrimonio les dicen lo mismo a todos, en los perfiles de Facebook le ponen lo mismo a sus parejas, se leen cosas como:

• “Eres lo mejor que me ha pasado en la vida
• “El destino quiso que nos encontráramos, tu eres mi complemento”
• “Sin pensarlo sin buscarlo llegaste a mi vida y nos amamos”
• “Es como si hubieras estado ahí para siempre”
• “Es como si nos conociéramos de toda la vida”

Salen de una pareja, entran con otra y le ponen la misma frase, pero escrita de otra manera. No sé si es que por ahí venden algún libro con frases típicas para zorras quita maridos.

A las “Buñuelitas” no les duran las parejas más de 3 meses, exceptuando que se casen o se vayan a vivir, porque eso les dura en promedio un año… Ellas cambian de pareja cada 3 meses, cuando ven otro que les gusta más. Ellas siempre aducen 3 cosas típicas para cambiar de pareja:

1. De frente le son infieles a la pareja actual y lo dejan por el nuevo
2. Arman un drama y una telenovela de desamor donde el chico se vuelve el villano que la maltrata y no la ama lo suficiente.
3. O es que ya se acabó el amor, él no pasa con ella todo el tiempo que la mujerzuela necesita, la ha descuidado y poco a poco se murió el amor.

Lo cierto es que Buñuelita es una mujerzuela de este estilo. Una zorra quita marido que tiene tela por cortar, se ha metido en muchísimas parejas, conozco de cerca uno de los casos.  La muy brincona no sabe nada de matemáticas, pero es experta dividiendo relaciones.

Ojalá nunca nos encontremos a una Buñuelita en nuestras vidas… y si eres una bueñuelita y estas leyendo esto: recapacita, endereza tu vida…